Pese a que de un pronto a otro la familia de Silvia Guzmán y Jerry Fonseca se quedaron sin su principal fuente de ingreso debido a la pandemia, esta pareja logró salir adelante de este difícil situación apoyándose de su emprendimiento, 28/30 Artesanal, que es amigable con el medio ambiente.
El aprovechar madera que otros desechan para hacer gran variedad de productos es como ellos han logrado consolidarse y al mismo tiempo diseñando productos muy gustados.
Servilleteros, chorreadores y juegos de mesa son parte de las cosas que hacen y que las personas pueden adquirir.
Nosotros empezamos con el emprendimiento en el 2019, porque yo tenía una idea de tener un mueblecito en la cocina y como mi papá tiene una tarimera, entonces con una madera de las tarimas que él tenía yo me la traje para la casa y mi esposo me hizo el mueblecito, entonces a varios miembros de mi familia les gustó como quedó, entonces se nos ocurrió seguir haciendo ese tipo de cosas durante los fines de semana para ayudarnos a sumar más que el salario de nuestros trabajos, pero cuando llegó la pandemia mi esposo se quedó sin trabajo y desde entonces este emprendimiento se ha convertido en nuestro sustento hasta el día de hoy, contó Silvia.
Debido a que ya estaban realizando trabajos de este tipo para así tener una fuente de ingresos extra, cuando Jerry se quedó sin empleo, rápidamente se decidieron a apostar más fuerte por el emprendimiento que ya tenían.
Las obligaciones de seguirle haciendo frente a los gastos de la casa, así como para lograr que su hija menor concluyera sus estudios, fue que no se quedaron de brazos cruzados y trataron de sacarle el máximo provecho a la venta de artículos de madera.
Cuando él se quedó sin trabajo nos quedamos pensando en qué hacer, porque lo que ingresábamos por la madera no era algo fijo, pero por lo menos teníamos eso como en reserva, entonces pensamos en cómo hacerlo más grande para poder sobrellevar las obligaciones de la casa, porque todo lo teníamos que seguir pagando.
Nuestra hija menor todavía estaba estudiando, entonces también buscamos como hacer crecer el emprendimiento para seguir cubriendo esos gastos, añadió.
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Negocio eco-amigable
Debido a que el papá de Silvia tiene un negocio dedicado a la compra de tarimas usadas para restaurarlas, la pareja trata de escoger entre lo mejor de la madera que su padre no necesite y así poder hacer sus productos.
Esta forma de trabajar permite que el desecho generado por la tarimera se disminuya porque Silvia y Jerry lo aprovechan al máximo.
Como mi papá tiene una tarimera, entonces ahí nosotros conseguimos la madera, nosotros escogemos la mejor madera que haya de la que mi papá no ocupe y comenzamos por desarmarla, quitarle los clavos, antes de utilizar la madera la seleccionamos y la pasamos por una cepilladora para que quede con un acabado más estético y después la dividimos por grosores y así ya podemos ir trabajando los diferentes productos que tenemos
La idea es mantener esa economía circular y tratar de desechar lo menos posible y no estar generando desechos hacia el ambiente, detalla.
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Diseños personalizados
Según explicó Silvia, las clientes pueden solicitarles cualquier producto de los que ellos manejan en su catálogo y pedirlos con un diseño personalizado.
Inclusive, también aceptan pedidos de personas que tengan la idea de realizar algún artículo en específico que tal vez no se haga usualmente.
Eso sí, la única limitante es que no sea de gran tamaño, debido a que la materia prima de ellos es reglas de madera de tarimas, por lo que tienen una longitud de entre 1 y 1,10 metros.
Podemos hacer productos a la idea de lo que tenga el cliente, eso sí, siempre y cuando se pueda hacer con las reglas de las tarimas que miden entre un metro y un metro y 10 centímetros, entonces no hacemos productos grandes, también porque el precio se incrementaría y la idea es que sean accesibles para las personas, entonces sí podemos hacer algo específico que nos pidan, pero siempre y cuando se apegue a las medidas que le digo, entonces no hacemos sillones, mesas, camas o ese tipo de muebles grandes, explicó.
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Convenios para crecer más
Silvia y Jerry también han decidido aliarse con varios negocios y así posicionar mejor el nombre de 28/30 Artesanal, por lo que varios de los productos que fabrican se pueden adquirir en dos tiendas con las que están aliados.
Aunque, también asisten todos los sábados a la feria de Desamparados para vender directamente todo lo que ellos hacen y poder mostrar la gran variedad de productos que manejan.
Trabajamos en consignación con dos tiendas, una en Coronado y la otra en Desamparados, nosotros les damos el producto y cuando ellos lo venden entonces nos lo pagan, nosotros les damos un margen de ganancia.
Nosotros les explicamos que, por ejemplo, nosotros vendemos la alcancía en ₡10.000 y si lo venden igual les damos un porcentaje, pero si quieren venderla más cara, diay es cosa del negocio, solo que ahí entrarían a competir con nosotros, porque si nos contactan directamente, nosotros vamos a tener el producto más barato, señaló.
Source
Mauricio León
